El Ayuntamiento de Eivissa ha puesto en marcha la oficina de Atención Preventiva en Infancia y Adolescencia (EMAPI) que se crea como Servicio Específico dentro del ámbito de los servicios sociales municipal. Las oficinas han sido visitadas por el alcalde de Ibiza, Rafa Ruiz, y la regidora de Bienestar Social, Carmen Boned.
El objetivo es intervenir directamente con el menor y en su entorno familiar inmediato para prevenir la aparición de situaciones que puedan afectar su normal desarrollo así como en la reducción de daños en aquellos niños que se encuentran en una situación de vulnerabilidad social.
La oficina de Atención Preventiva en Infancia y Adolescencia se creó durante la pandemia los primeros meses de 2021, para abordar el daño que se estaba detectando en parte de la población menor de edad y para coordinar actuaciones para garantizar el mínimo impacto de toda la transformación de la vida diaria de los niños y adolescentes que supuso la pandemia.
El espacio, ubicado a los locales municipales del Mercat Nou, está pensado por la atención puntual a familias con personas menores de edad a cargo, está estructurado en dos zonas. Una planta baja es donde se realiza la atención técnica a niños y adolescentes y a sus familias y una primera planta es donde se hace el trabajo interno del equipo, reuniones y la gestión de recursos y coordinaciones con todos los servicios implicados en cada una de las intervenciones sociales.
El EMAPI estará atendido por el Equipo Municipal de Atención Preventiva en Infancia y Adolescencia, formado por 1 trabajadora social, 2 educadoras sociales y se prevé en un breve plazo de tiempo la incorporación de una psicóloga.
Con la puesta en marcha dando respuesta así a la ley 9/2019 de Atención y los derechos de la infancia y Adolescencia de las Islas Baleares y a la más reciente Ley Orgánica de 8/2021 de 4 de junio de protección integral a la infancia y adolescencia frente a la violencia.
Metodología de trabajo
El acceso el servicio se obtiene una vez valorada la situación del menor por los equipos de las Unidades de Trabajo Social municipales a través de una derivación interna a la EMAPI.
La intervención que se inicia es de alta intensidad (elevada frecuencia y presencia con la persona menor y su entorno) y está centrada en trabajar en los espacios naturales en los cuales la persona menor convive, para intervenir y modificar aquellos aspectos o conductas que pueden afectar su crecimiento y desarrollo.
Se trata de un trabajo intrafamiliar y temporalmente limitado, es decir, no se trabaja de forma institucionalizada sino que se hace en el mismo domicilio y en el entorno comunitario del menor, a través de visitas a domicilio para trabajar las habilidades y las pautas educativas que recibe el niño por parte del núcleo familiar, así como el acercamiento y acompañamiento a recursos comunitarios que puedan mejorar su crecimiento y desarrollo como persona. En el momento que los indicadores de vulnerabilidad mejoran, el equipo de profesionales trabaja por un retorno consensuado a la autonomía del núcleo familiar.
La inversión para la adecuación del espacio ha estado de 35.049,66 €, e incluye mobiliario, cambio del suelo, instalación eléctrica, de datos y de red informática, instalación de climatización, pintura, rotulación e instalación de un toldo exterior.