El alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, acompañado del comisario de la Policía Nacional en Eivissa, Manuel Hernández, y el concejal de Patrimonio, Pep Tur, han visitado el edificio de viviendas municipales del barrio de sa Penya, recientemente rehabilitado, que a partir de esta semana empezará a acoger al funcionariado del Cuerpo Nacional de Policía.
El alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, ha destacado que “este edificio se pone en marcha en un momento histórico para el barrio, en el que no se ha dejado de trabajar de una manera integral. Es un proceso muy largo en el que el Ayuntamiento durante diferentes mandatos y gobernantes ha tenido siempre como objetivo recuperar el barrio de sa Penya y normalizarlo como un barrio más de la ciudad. Siempre teniendo en cuenta que está dentro de una joya patrimonial reconocida por la Unesco, un barrio con una riqueza patrimonial como pocos en las Islas Baleares y en el país y por el que cualquier Ayuntamiento estaría preocupado y destinaría muchos esfuerzos por recuperar”.
‘Hay ejemplos en diferentes ciudades de España con procesos similares donde entran diferentes variantes complejas de solucionar que llevan mucho tiempo. Podemos decir que estamos en el final del recorrido”.
Ruiz ha agradecido también la confianza de la Policía Nacional en ese proyecto. "Un trabajo continuo en el ámbito social, patrimonial, un trabajo sin ruido y tengo que agradecer a muchos departamentos del Ayuntamiento esta entrega diaria al barrio. Esta actuación se suma a todas las realizadas en el barrio como el FABLAB en sa Drassaneta, realizado desde Modernización, y por supuesto las concejalías de Policía, Núcleo Histórico y Patrimonio, Vías Públicas y Medio Ambiente, que hacen un trabajo continuo en el día en día", ha recordado.
Por su parte, el jefe de la Policía Nacional de Eivissa, Manuel Hernández, ha afirmado que "con este hecho se conseguen dos objetivos importantes: contribuir a mejorar la sensación de seguridad de un barrio y mejorar la problemática en relación con las viviendas que tenemos para funcionarios en general y policías en particular. Esta medida en principio es tremendamente esperanzadora para ambas cosas. Estaremos muy pendientes en cómo va evolucionando esta integración en sa Penya en la ciudad de una forma completa".
Las obras, que han sido financiadas por el Consorcio Patrimonio de la Humanidad, han consistido en la rehabilitación de las viviendas de toda la manzana entre las calles Alt y Retir, donde se ha pasado de 44 infraviviendas a 12 viviendas, con un presupuesto de 1,9 millones de euros. También se han llevado a cabo las obras de urbanización de las mismas calles Alt y Retir, con una inversión de 690 mil euros, que han consistido en la renovación de todas las instalaciones y soterramiento del cableado.
También se ha realizado la compra del mobiliario de las viviendas y la mejora de la instalación eléctrica del barrio por importe de 117 mil euros.
Las viviendas, de entre 45 y 75 metros cuadrados, están situadas en una superficie total de 940 metros cuadrados y distribuidas en tres niveles: planta soterrada y dos plantas. Cuentan con una o dos habitaciones con salón, comedor y cocina y se han construido siguiendo criterios de ahorro energético.
El proyecto, que fue redactado y dirigido por los técnicos municipales Ángela Rodríguez, Óscar del Rincón, Javier Pons y Manuel Navarro, contó con la recuperación del contorno original del edificio y la supresión de las partes añadidas y parasitarias no originales.