Vicepresidente durante unos años de la Colonia ibicenca en Barcelona, entidad que se constituyó en marzo de 1911 y que pretendía acercar los pueblos catalán e ibicenco, y ser el punto de encuentro de todos los ibicencos que se encontraban en la Ciudad Condal.
Mariano Mirabet, catalán y casado con una ibicenca, fue nombrado Hijo Adoptivo de la Ciudad de Eivissa en un acto, donde estaba presente, el día 10 de septiembre de 1911, "por ser el alma de la Colonia Ibicenca, entidad que tanto y tan bueno hace en favor de los hijos de esta tierra que se hallan en Barcelona necesitados de amparo; que la Colonia lleva su abnegación hasta el punto de ir varios de sus socios a esperar la llegada de los vapores correos, para cercionarse de si conducen a algún ibicenco que necesite de sus auxilios…"