Rafael Triguero y Juan Manuel Lafuente se han reunido este martes en la capital ibicenca y han anunciado que los trabajos para retirar el antiguo emisario de la EDAR de Eivissa empezarán a partir de la segunda quincena de octubre
El alcalde del Ayuntamiento de Eivissa, Rafael Triguero, y el conseller del Mar y del Ciclo del Agua del Gobierno de las Islas Baleares, Juan Manuel Lafuente, se han reunido este martes en Eivissa para tratar temas importantes para la capital ibicenca y que afecte a ambas administraciones, entre los que destacan el descenso de los fondeos ilegales registrados esta temporada en la bahía de Talamanca y el inicio a partir de la segunda quincena de octubre de la retirada del antiguo emisario de la EDAR de Eivissa.
Tras la reunión (que ha contado también con la participación del cuarto teniente de alcalde y concejal de Medio Ambiente, Jordi Grivé, y del concejal de Playas de la Ciudad, Rubén Sousa), Triguero y Lafuente han manifestado a los medios de comunicación que gracias a la coordinación institucional y al aumento de las inspecciones conjuntas con la Guardia Civil se han interpuesto un total de 26 actas de sanción. Esto ya ha provocado una reducción de la presencia de este tipo de chárter náutico ilegal sobre todo en la zona de la bahía de Talamanca. Las inspecciones continuarán al menos durante el mes de septiembre, incrementando aún más estas cifras.
El alcalde de la ciudad Rafael Triguero ha afirmado que "los ciudadanos de Eivissa pueden estar seguros de que el Ayuntamiento pondrá todos los recursos a su alcance para seguir combatiendo el intrusismo en todas sus formas. “Aquellos que piensen que pueden venir a Eivissa e incumplir la ley , se equivoquen, lo perseguiremos y les sancionaremos con toda la dureza posible”, ha reiterado Triguero.
El consejero Juan Manuel Lafuente ha subrayado la importancia de mantener estas medidas de control, no sólo para preservar los ecosistemas marinos de las Islas Baleares, sino también para garantizar la seguridad en el mar. "La reducción de fondeos ilegales es un claro indicativo de que las acciones coordinadas entre administraciones son efectivas. Nuestro objetivo es continuar trabajando en esta línea para garantizar que la bahía de Talamanca y otras zonas de la isla se mantengan libres de actividades que puedan poner en riesgo el medio ambiente marino. Pueden representar un peligro tanto para otras embarcaciones como para las personas que practiquen deportes náuticos en estas áreas", ha declarado Lafuente.
A continuación, el alcalde de la capital ibicenca ha explicado que el objetivo del Ayuntamiento es controlar los muelles de las playas del municipio donde carguen y descargan pasajeros de las embarcaciones que realizan excursiones y donde operen los party boats. Por eso, el alcalde Triguero ha anunciado que el Consistorio de Eivissa pedirá una autorización temporal a la Demarcación de Costes para ejercer esta competencia. "Debemos seguir poniendo orden en el municipio y mejorar la conviencia entre las personas que están en la playa y los que participen en estas excursiones". temporada en la bahía de Talamanca y que se ha saldado con inspecciones y expedientes de infracción a embarcaciones se ampliará el próximo año en las zonas de ses Figueretes y Es Viver.
Por último, Triguero y Lafuente también han adelantado que las obras de desmantelamiento y retirada del antiguo emisario submarino de la depuradora de Eivissa empezarán en la segunda quincena de octubre. El proyecto, de un millón de euros, incluye la retirada completa de los tramos secundados y semienterrados del emisario, así como de los lastres, bloques antiarrastre y sacos de cemento existentes en torno al emisario. El consejero balear del Mar y del Ciclo del Agua ha explicado que actualmente se están tramitando las autorizaciones y permisos necesarios con la Autoridad Portuaria de las islas Baleares, la Capitanía Marítima y la Dirección General de Costas y Litoral, objetivo de iniciar las obras dentro del plazo previsto. El plazo de ejecución de las obras es de cinco meses, en los que se espera minimizar cualquier impacto en la actividad local y en el medio ambiente marino.